lunes, 31 de mayo de 2010

¡Vaya manera de celebrar aniversarios!


Era día para poder celebrar:
Segundo aniversario del resurgir de Diego Urdiales tras la etapa de maltrato empresarial.
Primer aniversario de: Rubén Pinar abre la “gatera” de Madrid;
Miguel Tendero toma la alternativa en Las Ventas,
y también otro año atrás se ganaron sendas orejas en la novillada ferial.
Pues vean hoy lo hemos celebrado entre lamentos, porque tras haber visto a un Urdiales de gran dimensión hace no tanto, su zénit con los Victorinos el pasado otoño, esta tarde no sabíamos que le estaba pasando, ¿Qué te pasa, Diego? Esperamos que nos vuelva hacer entregarnos en una faena como lo ha hecho, aunque la elección ganadera de este año ya se hablo de que no tiró la moneda... ¿Quién nos hubiese imaginado sacándolo a hombros la tarde de Cuadri? No era un sueño tan profundo.
Hoy también se ha recalcado, si es que no lo dejo claro aquel sexto de El Puerto, que aquella puerta de Madrid se abrió de manera injustificada, barata y sin categoría. Rubén Pinar también el año anterior se ganó una oreja cuando arreaba de novillero, bien sea dicho con un toreo quizá no flor de estética, pero con mucha más hambre de triunfo propia de uno de sus filas y que no han aparecido este año, y esa ambición era la que debiese mantener aunque los triunfos obtenidos y sus influencias le hicieran creerse gran figura la temporada pasada. Para celebrar esos aniversarios varias series de mantazos con ventajismo y para poner la guinda las dos insuperables estocadas(si es que merecen ser llamadas así) en derrames sangrientos.
Mejor gusto como novillero tenía Miguel Tendero, y hoy celebrando aquellas efemérides, tales como la entrega de su alternativa, tras haber dejado pasar otro animal de provecho en su anterior comparecencia, esta tarde lo celebró también entre ventajas, pesadez y sin llegar a asemejarse a aquel novillero que tantas esperanzas dejó.
Del ganado, lo mejor indiferencia, el daño mayor a un fracaso tan evidente. Y sobre esta enrevesada empresa, la cual debe centrarse en cambiar menos cromos y valorar más los resultados artísticos, puesto que Javier Cortés, en su “otra plaza” dejó a los dos nuevos de hoy bastante por debajo de sus méritos, y sin embargo el getafense a entrado a la feria de milagro y con el deslucidor Pedro Gutiérrez. ¡Que viva el toreo de despachos!

No hay comentarios:

Publicar un comentario